ni lo pienso Hola, soy yo otra vez.
Que es que creo que me he dado cuenta de que no pienso.
En serio, que no pienso. Vale, bien, puedo solucionar problemas simples aplicando el teorema de pitágoras y puedo, incluso, elegir entre fresa y chocolate, o entender que las sábanas de 1,35 no valen para las camas de 1,50. Pero no mucho más.

Quiero decir que no dedico tiempo a pensar, no me siento y pienso, por ejemplo, que voy a hacer con mi vida, o que espero de la pareja o como evolucionará la sociedad en la que vivimos o, incluso, que se esconde detrás los titulares de El Pais de latinoamérica.

Las discursiones en las que tomo parte se parecen más a una especie de lucha dialéctica que a una "creación colectiva". Se discute para aprender algo, no para quedar por encima del otr@. Si no se trata de encontrar la verdad, ahora que sabemos que no la hay, si de, al menos, encontrar las verdades que hay en cada una de las posturas. Pero nada, ni por esas.

Luego ya no digamos con las decisiones importantes, ahí parece que se trate de una especie de apuesta a las carreras de caballos o espere que la intervención divina me ilumine con la luz adecuada... Pongo así los ojos para arriba, digo las palabras mágicas (que son: "mmmhhh...") y hale, ya está la decisión tomada, ¿pero esto que es lo que es?.

¿Y por que?. ¿Es que no me han enseñado a pensar? ¿Se yo de que se trata pensar? ¿Tengo los recursos necesarios?. Cuando le preguntas a alguien que piensa de algo se cree que le estás preguntando su OPINIÓN, pues no mire, le estoy preguntando el razonamiento, no la opinión.

Me parece que, como en tantas otras cosas, el "proceso de pensar" se compone de varias cosas:

1.- que el individuo en cuestión tenga el conocimiento de que aquello pueda hacerse. Es posible pensar, estoy casi convencido de ello.

2.- que existan los recursos técnicos para ello. Para empezar a pensar no se necesita casi nada, tal vez un tema y un sitio tranquilo, aunque para seguir avanzando es conveniente apoyarse con otros recursos metodológicos, como leer y escribir.

3.- conectar la voluntad de la tarea con los recursos técnicos. Y este es el gran misterio. Tal vez sea esto a lo que llaman "actitud". ¿Qué es lo que hace que sabiendo que se puede pensar y cómo le dediques cierto tiempo al día o a la semana?. ¿Por qué unos participan de ese proceso y otros solo ven la tele?. Está claro que con saber que se puede hacer y con tener las herramientas para ello no es suficiente, entra algo personal, tal vez relacionado con la sociología o la "pisicología" o la "pisiquiatría". Lo ignoro y este tercer componente, amigo Vicente, es el que va a determinar que internet y las herramientas informáticas (como ourproject.org) sean realmente las protagonistas de un cambio social.

La pregunta que me hago ahora es si seré capaz de superar esta etapa vital en la que defiendes las ideas de otros para que, pensando, se me ocurran las mias propias, sobre todo las que tienen que ver con mi vida.
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